SEGÚN UN ESTUDIO CIENTÍFICO LA TRUCHA SE EXTINGUIRÁ EN ESPAÑA EN 90 AÑOS

En el año 2040, el hábitat de la trucha común en España se habrá reducido a la mitad, mientras que para el 2100, los científicos pronostican la práctica desaparición de esta especie en todas las aguas de la Península Ibérica. Esta es la conclusión a la que llega el estudio “Global warming threatens the persistence of Mediterranean brown trout”, firmado por Ana Almodóvar, Graciela G. Nicola, Daniel Ayllón y Benigno Elvira, profesores en la Universidad Complutense de Madrid y en la Universidad de Castilla-La Mancha.
Durante 33 años, en el período 1975 a 2006, se estudiaron las variaciones de temperatura en una zona seleccionada de Navarra y se extrapolaron los datos a la temperatura del agua, dando como resultado un incremento notable de los valores, siendo más acusados aún desde 1986. Igualmente se llevó a cabo la monitorización de las poblaciones de salmónidos en 12 ríos de la cuenca del río Aragón mediante pesca eléctrica, observando una relación directa entre el ascenso de la temperatura del agua y el descenso del número de truchas en estos tramos analizados. El estudio señala a su vez que esta disminución de las poblaciones no puede atribuirse a otros factores como las modificaciones de hábitat o a la sobrepesca, ya que las zonas de estudio no estaban condicionadas por estas circunstancias. La situación se agrava aún más dada la vulnerabilidad de la Salmo trutta fario en España, con una gran variabilidad genética debido a las numerosas repoblaciones efectuadas y a la fragilidad que presenta ante el calentamiento continuo de los ríos, el verdadero causante de esta posible desaparición que prevé el estudio. Según el modelo diseñado por sus autores, esta previsión para la trucha común es extrapolable desde la zona de estudio, no sólo a toda España, sino a gran parte de la región europea mediterránea donde habita la especie.

Descarga del estudio completo en:
www.ucm.es/info/zoo/Vertebrados/elvira/Almodovaretal2012a.pdf

Terrible el diagnóstico. Esperemos que el pronóstico sea erróneo, pero en cualquier caso no hay duda de que la tendencia es esa. El cambio climático, pese a quien pese, es una realidad y las consecuencias se dejan notar. El factor genético no es menos grave y en este aspecto si que tenemos los pescadores, o los gestores de la pesca, una influencia directa. Es el eterno debate de las repoblaciones si o las repoblaciones no.
Mas allá de las polémicas existe otro factor al que parecen dar menos importancia pero que todos sabemos que realmente la tiene y mucha. Se trata del captura y suelta. Afortunadamente es una práctica cada vez más interiorizada por parte del colectivo y una cosa está clara: a menor descaste, menor necesidad de repoblación. Cada cual en la medida de lo posible puede aportar para evitar que este u otros pronósticos sean a futuro una realidad.