La Junta amplía la pesca del cangrejo hasta Navidad por la superpoblación...

por cipri_exocido Sáb 02 Nov 2013, 23:21

La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha decidido ampliar el tiempo para la pesca de los cangrejos que habitan en los ríos de Castilla y León hasta el 31 de diciembre. Más de tres meses del plazo que habitualmente se daba a los pescadores de esta especie, que en provincias como Burgos, Palencia, Salamanca y Segovia es considerado un plato de temporada para degustar. El motivo no es otro que la sobrepoblación «explosiva» que se registra en los cauces hidrográficos de la región, como consecuencia de la llegada de especies 'exóticas' que ponen en peligro la fauna y flora de los ríos.

Si hace dos años, la Junta había limitado hasta dos docenas los cangrejos que por día se podían sacar, con un límite de 10 reteles o redes, y con unas dimensiones no inferiores a los 9 centímetros, esta temporada hasta lo más pequeños se permiten e, incluso, está penalizado volver a tirarlos al río si caen en las redes.

La decisión de ampliar el periodo de pesca viene amparada por la normativa estatal que aprobó el Ministerio de Agricultura en diciembre del 2011. En ella se califica a los dos tipos de cangrejos que hay en la comunidad autónoma como especies exóticas invasoras.

«Tanto el cangrejo señal como el bautizado como rojo están catalogados como especies nocivas para la fauna y flora de los ríos de la región. Ambos tienen una procedencia del continente americano. El señal (Pacifastacus leniusculus) procede de la costa del Pacífico, y el rojo (Procambarus clarkii) es oriundo de la península de Florida.

Las dos especies se introdujeron por pescadores en los ríos de la meseta de forma no intencionada a partir de la década de los 50. Por el contrario, el cangrejo rojo sí que fue introducido por el Ministerio de Agricultura en las zonas de las Marismas del Guadalquivir, pero en este caso con la intención de establecer en estas áreas de economía deprimida piscifactorías y granjas marinas.

Para distinguir estas dos especies invasoras, además del color, la diferencia del cangrejo señal está en las dos marcas blancas que este muestra en sus dos pinzas.

Hay una tercera especie, la autóctona (Astacus astacus), que está clasificada como vulnerable. Su presencia, según explican fuentes de la Consejería de Medio Ambiente, es «testimonial» en las aguas de Castilla y León.

Especies carroñeras

Tanto el cangrejo señal como el rojo están clasificados como especies carroñeras, con alimentación carnívora y herbívora, y que se reproducen con mucha facilidad. Tanto es así que la Junta de Castilla y León ha determinado que su colonización en las aguas de los ríos se ha acelerado en la última década.

«Es difícil calcular cuál es el número de huevas que portan las hembras que llegan a adultas, ya que muchas sirven de alimentación a otras especies», explica Ignacio de la Fuente, jefe del Servicio de Caza y Pesca de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.

Para justificar la campaña de extinción de estas dos especies exóticas americanas, desde la Junta se recuerda que ambas han sido portadoras de un hongo que, en contacto con el cangrejo autóctono, provoca a este último una neurotoxina que afectaban a su sistema nervioso.

Esta enfermedad ha relegado a los cursos altos de los ríos de la comunidad al cangrejo autóctono, únicos lugares donde es difícil que lleguen el señal y el rojo por la existencia de aguas más frías.

Para combatir esta superpoblación, el Ministerio de Agricultura publicó el pasado 3 de agosto en el BOE un Real Decreto por el que regulaba el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras. Con el mismo se pretenden aplicar una Directiva de la UE del 2009, que busca evitar la reproducción de especies que atenten contra la fauna y flora locales.

La abundancia de ejemplares señal y rojo en algunos de los ríos ha conllevado también que hubiese menos control por parte de la guardería forestal y de los agentes de la Guardia Civil (Serprona).

Pese al gran número de estos ejemplares que se han visto en muchos de los afluentes del Duero no ha conllevado, sin embargo, la derogación de la prohibición para que los cangrejos puedan ser comercializados y distribuidos en restaurantes y bares. La razón, según fuentes de la Junta, es estrictamente sanitaria.

La decisión de sancionar a aquellos que los vendan (hasta 6.000 euros), ha sido aplaudida por los pescadores tradicionales, que apoyan el autoconsumo como principio para garantizar la supervivencia de estas especies aunque sean invasoras.

«Si para esta pesca tradicional en el medio rural aparece el dinero como reclamo, los ríos se convertirían en mercados», dice un pescador.

Ignacio de la Fuente recuerda además otra de las prohibiciones que implica sanciones más duras, como es la pesca de noche y con alumbrado artificial, que permitiría la captura de un mayor número de ejemplares.

Se quejan los aficionados del incremento de la tasa que ha fijado la Consejería para poder pescar cangrejos en la región. «La subida de 9 a 15 euros se justifica por la decisión del Gobierno regional de elevar el pasado año todas las tasas que se pagaban por cazar y pescar», dicen.

Tampoco ha sido bien entendida por los pescadores esta temporada la obligación de matar en el mismo lugar a aquellos ejemplares que caen en los reteles. Si ello no se realiza, los guardas pueden llegar a multar con más de 3.000 euros.

Medio Ambiente lo justifica para evitar nuevas invasiones de unas zonas a otras, y recomienda para ello a los pescadores que lleven una pequeña nevera donde depositarlos.

«En esta colonización explosiva del señal y el rojo ha tenido mucho que ver la mano del hombre. Las manchas de estas poblaciones han llegado a puntos de ríos de prácticamente toda la Cuenca del Duero y bastante alejados», dice De la Fuente, que fija a las provincias de Palencia y Burgos como las más cangrejeras. «En Segovia, la presencia del señal no se constató hasta el año 2000», apostilla.